Chris Argyris, catedrático de Harvard Business School, desarrolló la teoría del aprendizaje de Doble Bucle, el cual evoluciona nuestras creencias y modelos en base a la observación y la experiencia, frente a la tendencia de repetir lo aprendido, aunque no produzca los resultados más efectivos.


Aprendizaje de bucle sencillo

El aprendizaje básico, o de bucle sencillo, nos permite adquirir habilidades básicas, tener opiniones propias y procesos mentales que nos permiten tomar decisiones. Está basado en causa-efecto, lo que significa que aprendemos a reaccionar a partir de información que tenemos para obtener un resultado. Podemos cambiar y adaptar nuestras decisiones según el contexto, pero no cambiamos nuestras creencias ni nuestros modelos mentales, no llegamos a la causa del problema.
Ejemplos de aprendizaje de bucle sencillo sería la primera vez que seguimos un proceso o decidimos algo. Si no lo cuestionamos, en circunstancias similares, siempre actuaremos de la misma forma.

Aprendizaje de doble bucle

En contraste, el aprendizaje de doble bucle, responde a la pregunta de si estamos haciendo lo más correcto o efectivo en un momento dado. Se produce cuando tenemos la capacidad de cuestionar nuestros propios planteamientos y modificar métodos, reglas, asunciones, objetivos e ideas en base a la experiencia, que nos hace cambiar nuestro modelo mental, nuestras creencias y los criterios en los que se basan nuestras decisiones. Actúa sobre la causa raíz, para obtener otros resultados.
Cuando nos replanteamos procesos, reglas, creencias o metas y hacemos evaluaciones profundas, detectando sesgos mentales o áreas de mejora, empezamos a aprender de la experiencia, nos adaptamos y evolucionamos.

Aprendizaje de doble bucle

Fomenta la cultura del aprendizaje a partir de los errores

El aprendizaje de doble bucle permite mejorar

  • A nivel organizacional, ya que impulsa la innovación y la creatividad, y se obtiene una mejor comprensión de la organización, evaluando patrones y criterios para una mejor toma de decisiones, lo que produce un mejor aprendizaje organizacional. Las organizaciones que fomentan y motivan a todas las personas a pensar diferente, a cambiar sus modelos y creencias, el cómo y por qué se hacen las cosas, aumentan la capacidad de aprendizaje (doble bucle) para generar valor y mantener el sistema en evolución y mejora constante.
  • A nivel personal/individual, se toma tiempo y distancia para reflexionar de manera consciente sobre cómo resolvemos problemas, decidimos o hacemos las cosas, adaptando estos elementos según los resultados que hayamos obtenido en otras ocasiones. Requiere:
    • autoconciencia, para identificar pensamientos, comportamientos, criterios o creencias automáticas o no conscientes
    • honestidad, para reconocer las áreas de mejora
    • y responsabilidad, para llevar a cabo los cambios

Las organizaciones que promueven el aprendizaje de doble bucle y la aceptación del error como fuente para la mejora y la evolución resuelven mejor situaciones complejas, son más eficientes y se adaptan mejor a los cambios en sus entornos.

Como líder, para fomentar el aprendizaje de doble bucle:

  • anima a tu equipo a pensar distinto, a cuestionar y cambiar los modelos establecidos
  • permite que decidan algunas cuestiones, en lugar de decidirlo todo de manera individual, y acepta que cometan errores
  • fomenta el pensamiento divergente

Para ellos supondrá oportunidades para aprender (del error) y estar motivados. A ti te aportará otras visiones y te liberará tiempo que podrás dedicar a otras cuestiones. Entre todos generaréis más valor y mejoraréis la organización.

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